martes, 21 de febrero de 2017

Ansiedad precompetitiva

“No puedo perder, me estoy jugando mucho” este tipo de frases conjuntamente con nervios, palpitaciones, bloqueos, y otros pensamientos negativos,... son síntomas de que la ansiedad precompetitiva está presente. Cuando una persona se enfrenta a una competición y a la presión de conseguir sus objetivos es común que se puedan presentar algunos de estos síntomas.

La ansiedad precompetitiva es uno de los aspectos que más afectan al rendimiento de un deportista ya que bloquean a la persona incapacitándolo para poder actuar con serenidad. En algunas disciplinas el bloqueo puede ir más allá del nivel mental y llegar al bloqueo físico, con las graves consecuencias que esto puede conllevar. Se presenta alrededor de 24 horas antes de la competición y produce una sensación incomoda y desagradable para el deportista.

Algunos de los síntomas más comunes son:

Síntomas psicológicos: Auto-diálogo negativo, focalización reducida y redundante sobre un aspecto sin tener en cuenta los demás, pensamientos negativos e interferentes, incapacidad para la concentración, sensibilidad emocional, entre otras.

Síntomas fisiológicos y motores: Tensión muscular, dificultades respiratorias , molestias y dolores estomacales, diarrea y ganas de orinar, fatiga excesiva, leves mareos, palpitaciones, sudoración, dolor de cabeza, insomnio, etc.

Algunas técnicas para controlar este tipo de ansiedad son:

- Cambiar los pensamientos negativos por positivos, en lugar de pensar “no puedo perder” cambiarlo por “voy a hacerlo lo mejor posible”.
- Durante la temporada marcar unos objetivos asequibles según la preparación del deportista y de sus condiciones físicas, poner el listón demasiado alto puede llevar a este tipo de ansiedad, como dicen mejor poco a poco y bien hecho.
- Cuidar el descanso. Intentar descansar, pero sin forzar, ya que a veces la propia inquietud por dormir provoca más insomnio.


¿Sufres de ansiedad precompetitiva? No te preocupes, nuestro gabinete psicológico  te puede ayudar a superarlo, ¡contacta con nosotros!


martes, 7 de febrero de 2017

Sobrecarga en los gemelos.

La sobrecarga en los gemelos es una dolencia muy común en deportistas. Pero que no cunda el pánico, hay técnicas y maneras para poder prevenirlo. Así que en este post os contamos diferentes maneras de cómo, coloquialmente se dice, “prevenir antes de curar”.

Una de las principales formas de prevenir la sobrecarga en gemelos son los masajes de descarga. Con este tipo de masajes se descarga el musculo después del ejercicio y se consigue relajarlo para que no se sobrecargue. Es aconsejable realizar estos masajes de forma regular y sobre todo unas semanas antes de realizar un maratón, ya que así los gemelos llegaran en buenas condiciones.

Otro factor importante es correr de forma regular, ya que es una buena manera de prevenir las lesiones incluida la sobrecarga en los gemelos. Además, si la intención es aumentar el kilometraje, se debe realizar de forma gradual. Ya que hacerlo de forma radical es un gran error que a lo único que nos  puede llevar es a lesionarnos, debido a que el cuerpo no puede asimilar la carga de forma adecuada.

También es aconsejable incorporar a la rutina de entrenamiento los estiramientos y el calentamiento, de este modo se prepara al cuerpo y sobre todo a los músculos para el esfuerzo más intenso que se realizará posteriormente.

La elección de las zapatillas también es muy importante. No elegir el calzado apropiado puede tener como consecuencia inducir al pie a malas posiciones y como consecuencia producir sobrecargas, además otro tipo de lesiones. Para saber que tipo de zapatilla es la correcta, es conveniente realizar un Estudio Biomecánico de la Pisada para conocer el tipo de pisada y saber si es conveniente el uso de plantillas personalizadas.

Si es demasiado tarde y ya sufres de esta dolencia, no te preocupes ¡tiene solución!
Si te estás preguntando si es buena idea salir a correr, la respuesta es ¡No!. Lo primero es visitar a un especialista que nos trate y realice una descarga. Por otro lado, es conveniente revisar el calzado y hacer un Estudio Biomecánico de la Pisada para saber cuál es la causa. Una vez hecha la puesta a punto, se deben de adoptar las medidas antes mencionadas para evitar que vuelva a pasar.

Recuerda, más vale prevenir que curar.